martes, 6 de octubre de 2015

Efecto 2038

Allá por 1999, la amenaza de un colapso a nivel tecnológico por el temido “Efecto 2000” o “Error del milenio” provocó un temor generalizado en la sociedad ante el fallo que provocaría que tras el 31 de diciembre de 1999 los sistemas informáticos pasarían al 1 de enero de 1900 en vez de al 1 de enero de 2000 debido a que muchos sistemas codificaban el año en dos dígitos. Este “Efecto 2000” que se corrigió con unos miles de millones de euros, nos sirve para explicar el “Efecto 2038” o “Y2K38”.

El “Efecto 2038” no es sino otro “bug” relativo, en este caso, a la codificación del tiempo en los sistemas de 32 bits (el reloj que usan), que nos afectaría en enero del año 2038. Y es que el reloj que tienen muchos equipos se basa en POSIX, un simple contador de segundos que va ascendiendo con cada segundo que pasa y que tiene como fecha de referencia el 1 de enero de 1970; por tanto, el tiempo es igual al número de segundos transcurridos desde esta fecha de referencia.

Sin embargo, como en los sistemas de 32 bits los tiempos se codifican con un número entero y un signo, llegará un momento en que el contador llegará al número máximo que es capaz de almacenar en positivo y comenzará a contar en negativo (volveremos a 1901). Los sistemas que cuentan la hora desde (21:00 31/12/1969) provocarían el error de cálculo a las 00:14:07 del 19 de enero de 2038, ya que confundirán la fecha con el 13 de diciembre de 1901.

Fuente: www.muyinteresante.es

viernes, 10 de abril de 2015

El código Da Vinci en la Mona Lisa

La famosa Mona Lisa de Leonardo da Vinci esconde en su pupila izquierda la clave de laidentidad de la modelo en la que el pintor se inspiró, de acuerdo con el historiador italiano Silvano Vinceti, presidente de la comisión nacional de patrimonio cultural en su país.

Según recogía ayer el periódico The Guardian, Vicenti sostiene que el pintor renacentista trazó letras y números minúsculos en las pupilas de la mujer retratada. "En el ojo derecho aparecen las letras LV, que podrían ser las iniciales de Leonardo Da Vinci, y en el izquierdo también hay símbolos", explica. Vinceti mantiene que en ese ojo se disciernen las letras "B" o "S" o posiblemente las iniciales "CE", lo que considera claves de vital importancia para averiguar la identidad de la modelo.

Ésta ha sido identificada a menudo como Lisa Gherardini, la esposa de un mercader florentino, pero el investigador italiano no está de acuerdo, ya que mantiene que la Mona Lisa fue pintada en Milán. "Detrás del cuadro aparecen los números '149', con un cuarto número medio borrado, lo que sugiere que Da Vinci lo pintó cuando estaba en Milán en la década de 1490, usando como modelo una mujer de la corte de Ludovico Sforza, el duque de Milán", puntualiza.

martes, 3 de marzo de 2015

Los problemas de dormir con el móvil cerca

Las actuales prestaciones de los smartphones o teléfonos inteligentes han convertido a estos dispositivos en una especie de extensión de nuestro cuerpo. Vamos con ellos a todas partes; incluso al baño y, por supuesto, duermen a nuestro lado, aunque sea en la mesita de noche y rara vez los apagamos. ¿Qué riesgos conlleva dormir con el móvil encendido?

Según un estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) el problema procede de la pantalla de los dispositivos (sea móvil, ebook, portátil o tablet). La luminiscencia de las pantallas reduce la melatonina(la hormona reguladora del sueño) y además prolonga el tiempo que tardamos en dormirnos. También retrasa y reduce el sueño REM; el estado de alerta aumenta por la noche -al contrario de como debería ser-... todo ello conduce a que retrasemos la hora del sueño y que suframos de insomnio o de deficiencias en el sueño por esta interrupción silenciosa de los ritmos circadianos del organismo.

Por si esto fuera poco, el hecho de que segundos antes de disponernos a dormir y cerrar los ojos, hayamos echado un vistazo a nuestro dispositivo,hiperexcita nuestro cerebro, lo que es el efecto contrario que necesitamos antes de dormir. Para que nuestro cerebro descanse y durmamos lo mejor posible, deberíamos apagar nuestros móviles y nunca encenderlos mientras dormimos puesto que cualquier vibración, sonido o destello puede despertarnos e interrumpir nuestros ciclos de sueño.

Despertarnos a menudo por una notificación luminosa en el móvil nos lleva a lo que se ha denominado como “insomnio tecnológico”, una patología que provoca insomnio en su fase más inicial pero que, en algunos casos, puede provocar despertares intrasueño y volverse más acusado.